ensayo: la camara lucida de Roland Barthes

PARTICULARIDADES ESPIRITUALES DESDE LA GENERALIDAD

RECONOCIENDO SIMBOLISMOS MAS ALLA DE TECNICISMOS

Desde sus inicios a principios de el siglo XX. La fotografía había sido dotada de títulos que la definen como una imagen fiel a la realidad, un acto de transformar el entorno en objetos, contemplando a la ciertos formatos estéticos de composición para que sea llamada una buena fotografía pero, ¿qué sucede con la esencia, con el interés personal y espiritual? En el libro, “ La cámara lucida” de Roland Barthes el autor reconoce formas de cautivarse por la fotografía, que van mas allá de la los formalismos, sin dejarlos de lado, reconociendo  los detalles particulares que invitan al espectador a preguntarse sobre el contenido de la foto, lo que estaba aconteciendo en el momento en que fue capturada y reconocerse personalmente a través de dicha imagen.

 Cabe preguntar ( al igual que lo hace Roland) ¿ la fotografía aun existe? Y si es así ¿ se puede decir que tiene una categoría  propia? Desde pi percepción personal, creo que aun existe, pero no en el contexto en que comenzó ( como una representación fiel a la realidad, por arriba de la pintura), actualmente, la fotografía ha mutado, incorporando un sentido de el propio “yo”, una forma de reconociendo de la percepción de el fotógrafo ante su entorno, tales como aspectos culturales, políticos y sociales, que lo hacen reconocer situaciones únicas para el mismo. Y de esta manera reconocibles para los espectadores de su trabajo. Hasta el momento ( y siguiendo la formula de Magriette) la pipa estaba considerada como una pipa, pero eso ha cambiado, dejando de ver al sujeto que posa frente a la cámara como objeto( que en mi percepción, solo generaba una desnaturalización de el espíritu de el sujeto estudiado). Este cambio logro que, tanto el espectador como el fotógrafo voltearan la mirada hacia la esencia de el sujeto a fotografiar, encontrando singularidades, sensitivas, espirituales y cognitivas atrapadas en la fotografías, como si se tratase de la cueva de las mil maravillas, la fotografía comienza a invitar a el espectador a preguntarse, a través de un metalenguaje, sobre el contenido de la imagen. Rolan expresa esta idea diciendo ” La vida privada no es mas que una zona de el espacio, de el tiempo, en la que no soy una imagen, un objeto. Es mi derecho político a ser un sujeto, lo que he de defender” lo que complementa con cierto reconocimiento de el pasado, punto que tratare mas adelante.

Otra de las particularidades que comienzan a surgir en la imagen fotográfica es una dualidad captada en el momento, lo comparo con una de las formas de trabajo de Magriette, en la cual sobreponía personajes, escenas o acontecimientos en un contexto en el cual, por lógica no era posible su interacción. El imagen captada a través de el lente, se encuentra una dualidad similar a las de Magiette, lo que invita a pensar en la situación exacta detrás de la imagen que hasta hace poco se escondía tras un velo de indiferencia, pero ahora no se puede pasar desapercibida, las particularidades comienzan a surgir. Tales como el studium particularidad que solo puedo asimilar como una especie de “ marco teórico”  precedente a la imagen, un análisis de temas que interesan recurrentemente a el fotógrafo, donde se pueden tomar en cuenta como parte de la investigación situaciones culturales, políticas y sociales. Esta particularidad se podría encontrar en la dualidad antes mencionada en la imagen, a partir de el studium se construye la escena que se intentara perpetuar en la fotografía. Estas dos particularidades invitan a dirigir la vista de el espectador a el puntum una especie de puntada, una lanza, algo punzante y vibrante dentro de la imagen donde se encierra toda la fuerza de la composición, muy distinta a la agresión que puede habitar en algunas imágenes. El puntum puede resultar en una incitación o una subversión al deseo de el fotógrafo, que sumerge al espectador en la escena viva tal y como la vivió en su momento el que logro capturarla tras el lente.

Al captar las imágenes como si fueran vivientes, vibrantes y enérgicas se elimina la idea de retratar la realidad de manera fiel, a esto se le une un ultimo punto importante; reconocer que una fotografía siempre es el reflejo de un suceso pasado, con esto no quiero decir que se vuelva obsoleto, o un instrumento de la nostalgia, de el recuerdo y la melancolía. Al reconocer el pasado se puede reconocer a si mismo en el contexto actual, encontrar las conexiones que han devenido de otros momentos y lugares, preguntarse si es que estas en el mismo sitio que el fotógrafo al momento de tomar la escena, y poder re-dirigirlo a un contexto actual, como una especie de circulo infinito, ya que con este ultimo punto se puede liberar la curiosidad para desarrollar un marco teórico que, como dije en el primer punto, es parte de el inicio de el imaginario que hay detrás de una fotografía que logre cautivar por sus singularidades y no por sus cualidades técnicas sin necesidad de comprometer una u otra en la imagen final.

Los puntos citados anteriormente me llevan a reflexionar en la imagen que puedo lograr si logro analizar antes de capturar una escena, destacando estos conceptos( presentes todo el tiempo en la foto) volviéndolos visibles a través de mi percepción personal logrando una interacción con los espectadores, invitándolos a reflexionar de igual manera sobre los contextos ocultos tras la fotografía.